Me gustaba al despertar, oír Somebody to love mientras iba al baño a lavar la cara y decidía que ropa poner. Luego desayunaba y rápidamente me iba a trabajar, antes de eso, tenia la suerte de encontrar a mi amor en el corredor, y robarnos un fugaz beso. Cuando volvía por las tardes, teníamos tiempo para estar juntos, siempre y cuando a ninguno de los dos le tocasen horas extras, en ese caso, solo nos encontrabamos a la noche, aunque peleasemos por vernos antes. Hoy, ya llegué tarde, ella estaba en cama, completamente dormida, con la blusa azul marino que tan enorme le sentaba, me acerque y le dije al oído; -Buenas noches, princesa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario