Muchas gotas fueron derramadas en esta habitación,
sueños imaginarios y fracasos incontables.
Mariposas han volado los últimos años,
golondrinas me han despertado mañana tras mañana.
Suspiros evaporados en la sublime niebla de invierno.
Tropiezos con muchos zapatos y alguna que otra piedra.
Criaturas verdes con escudos de guerreros acompañan mis rutinas,
murallas oxigenan mis palabras.
Pensamientos y metas in-borrables,
palabras desdichadas y mágicos seres observan mis pasos de gigante,
grandiosos caballeros tan blandos como tus mejillas...
No estoy sola,
tengo un despampanante ejército de valientes luchando por los días felices.
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